CONOCE A LA
SIEMPRE VIRGEN MARÍA BÍBLICA, LA PRIMERA CRISTIANA, LA LLENA DE GRACIA Y MADRE
DE DIOS
ESTO LE DESAGRADA TERRIBLEMENTE AL DEMONIO Y A LOS HEMBANGELIKOS Y NO LO PUEDE SOPORTAR
LA VIRGINIDAD PERPETUA DE MARÍA BENDITA
Los protestantes frecuentemente citan a Jerónimo como el más grande estudioso bíblico de su época cuando tratan de utilizar sus escritos para refutar la canonicidad de las partes deuterocanónicas de la Escritura (a pesar de que en realidad Jerónimo no sostuvo esta posición en este tema).
Sin embargo, nunca citan a Jerónimo como el más grande estudioso de su día cuando discuten la virginidad perpetua de María.
La razón, por supuesto, es que, en el trabajo siguiente, él no estaba de acuerdo con la posición actual común entre los protestantes en este tema (a pesar de que Lutero, Calvino, Zwingilio y otros Reformadores Protestantes reconocen la virginidad perpetua de María).
La obra protestante de 38 volúmenes, "Padres de la Iglesia" dice: "Jerónimo…trata de probar que las hermanas y hermanos de los que se habla, eran ya sea hijos de José por un matrimonio previo, o primos en primer grado, hijos de la hermana de la Virgen".
Él es completa y devastadoramente bíblico mientras lo hace, usando la Biblia para aniquilar los mismos argumentos modernos que los protestantes tratan de utilizar contra María siempre virgen.
Este panfleto, que apareció alrededor de A.D. 383 contiene una refutación al innovador teológico Hembangelikos, que negaba la fe de todo el mundo cristiano al asegurar de pronto, contrario a virtualmente todos los autores anteriores, que María tenía otros hijos además de Jesús.
Como el panfleto revela, los modernos opositores de la Virgen no han hecho más que reinventar la rueda.
Introducción
1. No hace mucho me pidieron algunos hermanos que contestara a un panfleto escrito por los Hembangelikos
He atrasado hacer esto, no porque sea un tema difícil en el cual defender la verdad y refutar a un campesino ignorante que tiene escaso conocimiento del primer destello de aprendizaje, sino porque me temía que mi respuesta pudiera hacerlo parecer alguien digno de ser derrotado.
Estaba también la consideración adicional de que un tipo turbulento (el único individúo en el mundo que se cree a si mismo laico y sacerdote, uno que, como se ha dicho, piensa que la elocuencia consiste en usar muchas palabras y considera que hablar mal de cualquiera es ser testimonio de una buena conciencia), empezaría a blasfemar peor que nunca si la oportunidad de discutir se le daba.
Se pararía sobre un pedestal, y podría publicar a lo largo y a lo ancho sus puntos de vista.
También hay razón de temer que cuando la verdad le falle, él podría atacar a sus
oponentes con el arma del abuso.
Pero todos estos justos motivos para mantener el silencio, hace poco han dejado de influenciarme, debido al escándalo causado a los hermanos que estaban disgustados ante sus delirios.
El hacha del Evangelio debe, por lo tanto, aplicarse a la raíz de un árbol sin frutos, y tanto el árbol como su follaje sin fruto deben tirarse al fuego, para que los Hembangelikos -que nunca aprendieron a hablar- pueda a la larga aprender a callar su lengua.
2. Debo invocar al Espíritu Santo para expresar Su significado por mi boca y defender la virginidad de María Bendita.
Debo llamar al Señor Jesús para resguardar de toda sospecha de relación sexual a la sagrada habitación del vientre en el que Él habitó por diez meses.
[NOTA: Jerónimo usa el método antiguo de contar a las partes de los meses como meses enteros, por lo tanto, a un embarazo de poco más de nueve meses se dice que duró diez meses; luego, en el capítulo 20, muestra que sabe que un embarazo normalmente dura nueve meses].
Y también debo rogar a Dios Padre que muestre que la madre de Su Hijo, que fue una madre antes de ser una recién casada, continuó siendo virgen después de que su hijo nació.
No siento ningún deseo de trasladarme a los campos de la elocuencia, no nos valemos de las trampas de los lógicos o las espesuras de Aristóteles.
Nosotros utilizaremos las verdaderas palabras de la Escritura.
Que él sea derrotado por las mismas pruebas que ha utilizado contra nosotros, para que pueda ver que era posible para él leer lo que está escrito, y aun así ser incapaz de discernir la conclusión establecida de una fe sólida.
3. La primera declaración a los [Hembangelikos] fue:"Mateo dice, "Y el nacimiento de Jesucristo fue así: Que siendo María su madre desposada con José, antes que se juntasen, se halló haber concebido del Espíritu Santo.
Y José su marido, como era justo, y no quisiese infamarla, quiso dejarla secretamente.
Y pensando él en esto, he aquí el ángel del Señor le aparece en sueños, diciendo: José, hijo de David, no temas de recibir a María como esposa, porque lo que en ella es engendrado, del Espíritu Santo es". [Mateo 1:18-20].
Noten, lo que él [Mateo] dice, la palabra usada es "desposada", no "confiada" como usted [Jerónimo] dice, y por supuesto la única razón por la que estaba desposada es que algún día estaría casada.
Y el Evangelista no hubiera dicho "antes de que se juntasen" si no se hubieran juntado, porque nadie hubiera usado la frase "antes de que cenara" acerca de un hombre que no va a cenar.
Luego, nuevamente, el ángel la llama "esposa" y habla de ella como si estuviera unida a José.
Luego somos invitados a escuchar a la declaración de la Escritura: "Y despertando José del sueño, hizo como el ángel del Señor le había mandado, y recibió a su mujer.
Y no la conoció hasta que parió a su hijo" [Mateo 1:24-25 a]."
4. Tomemos los puntos uno por uno, y sigamos las vías de esta impiedad para que podamos mostrar que los [hembangelikos] se contradicen a sí mismo.
Él admite que ella estaba "desposada," y en el siguiente aliento la tiene como esposa de un hombre, a pesar de que ha admitido que tan sólo era desposada.
Nuevamente la llama "esposa" y luego dice que la única razón por la que ella estaba desposada era que algún día podría casarse.
Y, por miedo a que no pensemos que eso es suficiente, "la palabra usada", dice él, "es "desposada" y no "encomendada"", es decir, aún no es una esposa, aún no unida por la obligación del matrimonio.
"ANTES DE QUE SE JUNTASEN"
Pero cuando él continua, "el Evangelista nunca hubiera aplicado las palabras, "antes de que se juntasen" a personas que no iban a juntarse, al igual que uno no dice, "antes de que cenara", cuando el hombre no va a cenar," no se si afligirme o reír.
¿Deberíamos condenarlo de ignorancia, o acusarlo de ser precipitado?
Es como si supusiéramos que si una persona dice: "Antes de cenar en el puerto, yo navegué a África," sus palabras no pueden ser verdaderas a menos que estuviera obligado de alguna manera a cenar en el puerto.
Si escojo decir: "El apóstol Pablo, antes de ir a España, fue puesto bajo cadenas en Roma," o (como yo ciertamente podría) "Elvidio, antes de arrepentirse, murió," debería Pablo, al ser liberado, ir inmediatamente a España, o podría Elvidio arrepentirse después de la muerte, a pesar que la Escritura dice: "Porque en el sheol no hay memoria de ti: ¿Quién te loará en el sepulcro?" [Salmo 6:5]
¿Acaso no debemos entender la preposición "antes," a pesar de que frecuentemente denota orden en el tiempo, y que sin embargo a veces se refiere solamente al orden en los pensamientos?
Así que no hay necesidad (si hubiera suficiente causa interviniendo para prevenirlo) para que nuestros pensamientos se realicen.
Cuando, entonces, el Evangelista dice "antes de juntarse," él indica al tiempo que inmediatamente precede al matrimonio, y muestra que las cosas estaban tan avanzadas que aquella que había sido desposada estaba en el punto de convertirse en una esposa, como si hubiera dicho, "antes de que se besaran y abrazaran, antes de la consumación del matrimonio, se encontró que ella estaba embarazada.
" Y ella fue descubierta así nada menos que por José, que vio con miradas de ansiedad crecer el vientre de su desposada, en este momento, casi el privilegio de un esposo.
Sin embargo, no sigue, como los ejemplos previos muestra, que haya tenido relaciones con María después del nacimiento, cuando sus deseos habían sido ahogados por el hecho de que ella ya había concebido.
Y a pesar de que encontramos que se le dice a José en un sueño "no temas recibir a María como esposa" [Mateo 1:20]; y nuevamente, "Y despertando José del sueño, hizo como el ángel del Señor le había mandado, y recibió a su esposa.", nadie debería molestarse por esto, como si, a pesar de ser llamada "esposa", ella deje de estar desposada, porque sabemos que es usual en la Escritura dar el título "esposa" a aquellos que están comprometidos.
La siguiente evidencia del Deuteronomio establece el punto.
"Mas si el hombre," dice el escritor, "halló una moza desposada en el campo, y él la agarrare, y se echare con ella, morirá sólo el hombre que con ella se habrá echado; porque él ha humillado a la esposa de su prójimo" [Deut. 22:25-27].
Y en otra
parte, "Cuando fuere moza virgen desposada con alguno, y alguno la hallare
en la ciudad, y se echare con ella; entonces los sacaréis a ambos a la puerta
de aquella ciudad, y los apedrearéis con piedras, y morirán; la moza porque no
dio voces en la ciudad, y el hombre porque humilló a la esposa de su prójimo:
así quitarás el mal de en medio de ti" [Deut. 22:23-24].
En otra parte
también: "¿Y quién se ha desposado con mujer, y no la ha tomado?
Vaya, y
vuélvase a su casa, porque quizá no muera en la batalla, y algún otro la tome
" [Deut. 20:7].
Pero si
alguien tiene una duda de porqué la Virgen concibió después de estar desposada
en lugar de cuando no estaba desposada con alguien, o, para usar la frase de la
Escritura, sin "esposo", déjenme explicar que hay tres razones –
Primero, que, por la genealogía de José, a cuya parentela pertenecía María, el
origen de María podía ser mostrado.
Segundo, que
ella no podría haber sido apedreada como adúltera de acuerdo a la Ley de
Moisés.
Tercero, para
que en su huida a Egipto ella pudiera tener un apoyo, a pesar de que era de un
guardián y no el de un esposo.
¿Quién en ese
momento hubiera creído la palabra de la Virgen de que había concebido de
Espíritu Santo, y que el Ángel Gabriel había venido y anunciado el propósito de
Dios?
¿Acaso no
hubieran dado todos opinión en contra de ella, como con Susana [Dan. 13]?
Ya que, al
día presente, ahora que el mundo entero a abrazado la fe [cristiana], los
judíos arguyen que cuando Isaías dijo, "He aquí que la virgen concebirá y
parirá un hijo" [Is. 7:14], la palabra hebrea denota una mujer joven, no
una virgen, es decir, la palabra es almah, no bethulah, una posición que, más
adelante, disputaremos con más detalle.
Por último,
exceptuando a José, Isabel y a la misma María, y otros pocos que, suponemos,
oyeron decir la verdad a ellos, todos consideraban a Jesús como el hijo de José.
Y era tanto
así que incluso los Evangelistas, expresando la opinión prevalente, que es la
regla correcta para un historiador, lo llaman el padre del Salvador, como, por
ejemplo, "Y vino (Simeón) por Espíritu al templo. Y cuando metieron al
niño Jesús sus padres en el templo, para hacer por él conforme a la costumbre
de la ley" [Lucas 2:27], y en otros lugares, "E iban sus padres todos
los años a Jerusalén en la fiesta de la Pascua" [Lucas 2:41].
Y después,
"Y acabados los días, volviendo ellos, se quedó el niño Jesús en
Jerusalén, sin saberlo sus padres " [Lucas 2:43].
Observe a lo
que dijo la misma María, cuando respondió a Gabriel con las palabras,
"¿Cómo será esto? porque no conozco varón." [Lucas 1:34, traducción
literal del Griego], dice acerca de José, "Hijo, ¿por qué nos has hecho
así? He aquí, tu padre y yo te hemos buscado con dolor" [Lucas 2:48].
No tenemos
aquí, como muchos insisten, las palabras de judíos o de burlones.
El
Evangelista llama a José "padre". María confiesa que él es su padre.
No (como dije
antes) que José fuera realmente el padre del Salvador, pero que para preservar
la reputación de María, era reconocido por todos como su padre, aunque antes de
escuchar la admonición del ángel, "José, hijo de David, no temas de recibir
a María como esposa, porque lo que en ella es engendrado, del Espíritu Santo
es" [Mateo 1:20] él había planeado repudiarla en secreto; lo que muestra
que él bien sabía que el hijo concebido no era suyo.
Pero hemos
dicho suficiente, más con el objeto de impartir instrucción que de responder a
un oponente, para mostrar por que José es llamado el padre de nuestro Señor, y por
qué María es llamada esposa de José.
Esto además
contesta de una vez la pregunta de por qué ciertas personas son llamados sus
hermanos.
"HASTA"
5. Esto, sin
embargo, es un tema que encontrará su lugar apropiado más adelante.
Debemos ahora
movernos a otras cosas.
El pasaje en
discusión ahora es, "Y despertando José del sueño, hizo como el ángel del
Señor le había mandado, y recibió a su mujer.
Y no la
conoció hasta que parió a su hijo primogénito: y llamó su nombre JESUS.
Aquí, antes
que nada, es innecesario para nuestro oponente mostrar tan elaboradamente que
la palabra "conoció" tiene referencia al coito, en lugar de una
aprensión intelectual, como si alguien lo negara, o cualquier persona en uso de
sus sentidos pudiera nunca imaginar la locura que Elvidio se toma tanto trabajo
en refutar.
Entonces ella
enseñaría que el adverbio "hasta" implica un tiempo fijo y
definitivo, y que cuando es cumplido, él dice que el evento que antes no
ocurrió, toma lugar, como en el caso ante nosotros, "y no la conoció hasta
que parió a su hijo.
" Es
claro, dice él, que ella fue conocida después de que ella parió, y que ese
conocimiento fue solo retrasado por engendrar a un hijo.
Para defender
su posición apila texto sobre texto, agita su espada como un gladiador con los
ojos vendados, resuena su ruidosa lengua, y termina por no herir a nadie más
que a sí mismo.
6. Nuestra
respuesta es breve: las palabras "conoció" y "hasta" en el
lenguaje de la Sagradas Escrituras son capaces de un doble significado.
Acerca del
primero, él mismo nos dio una disertación para mostrarnos de que se deber
referir a una relación sexual, y nadie duda de que es utilizado a menudo acerca
del conocimiento o comprensión, como, por ejemplo, "el niño Jesús se quedó
atrás en Jerusalén, y sus padres no lo sabían".
Ahora debemos
probar que, como en el único caso que siguió la usanza de la Escritura, así que
acerca de la palabra "hasta" él está completamente refutado por la
autoridad de la misma Escritura, que muchas veces denota por su uso [de
"hasta"] un tiempo fijo (él mismo nos dijo esto) [y que]
frecuentemente el tiempo sin limitación, como cuando Dios por la boca del
profeta dice a ciertas personas, "Y hasta la vejez yo mismo, y hasta las
canas os soportaré yo: yo hice, yo llevaré, yo soportaré y guardaré" [Is.
46:4].
¿Dejará Él de
ser Dios cuando ellos sean ancianos?
Y el Salvador
en el Evangelio dice a los Apóstoles, "y he aquí, yo estoy con vosotros
todos los días, hasta el fin del mundo.
Amén"
[Mateo 28:20b].
¿Acaso el
Señor después del fin del mundo abandonará a Sus discípulos, y al mismo tiempo
que estarán sentados en doce tronos para juzgar a las doce tribus de Israel
estarán privados de la compañía de su Señor?
Nuevamente
Pablo el Apóstol escribiendo a los Corintios dice: "Pero cada uno en el orden
que le corresponda: Cristo en primer lugar; después, cuando Cristo vuelva, los
que son suyos.
Entonces
vendrá el fin, cuando Cristo derrote a todos los señoríos, autoridades y
poderes, y entregue el reino al Dios y Padre.
Porque Cristo
tiene que reinar hasta que todos sus enemigos estén puestos debajo de sus
pies" [1 Cor. 15:23-25].
Reconociendo
que el pasaje se relaciona a la naturaleza humana de nuestro Señor, no negamos
que las palabras se dicen acerca de Aquel que sufrió la cruz y nos ordenó
después a sentarnos en la mano derecha.
¿Qué nos
quiere decir entonces al decirnos "porque Él tiene que reinar, hasta que
todos sus enemigos estén puestos debajo de sus pies"?
¿Acaso el
Señor solo reinará hasta que Sus enemigos empiecen a estar bajo sus Pies, y una
vez que estén bajo sus pies Él cesará de reinar?
Por supuesto
que Su reino comenzará entonces en su plenitud cuando Sus enemigos comiencen a
estar bajo Sus pies. [cf. Lucas 1:33, Apoc. 11:15].
También David
en la cuarta Canción de Ascensión [Salmo 123] dice así: "Suplicantes
miramos al Señor nuestro Dios, como mira el criado la mano de su amo, como mira
la criada la mano de su ama, hasta que él nos tenga compasión" [Salmo
123:2]
¿Acaso el
profeta verá al Señor hasta que obtenga compasión y cuando obtenga la compasión
volverá sus ojos al suelo? – a pesar de que en otra parte él dice, "Mis
ojos se consumen esperando que me salves, esperando que me libres, conforme a
tu promesa" [Salmo 119:123].
Yo podría
acumular incontables casos de este uso, y cubrir la verbosidad de nuestro
asaltante con una nube de pruebas; sin embargo, solo añadiré unas pocas, y
dejaré al lector que descubra otras parecidas por sí mismo.
7. La Palabra
de Dios dice en Génesis, "Ellos le entregaron a Jacob todos los dioses
extraños que tenían y los aretes que llevaban en las orejas, y Jacob los
enterró debajo de una encina que estaba cerca de Siquem, y los escondió hasta
este día" [Gen. 35:4].
Igualmente,
al final de Deuteronomio, "Moisés el siervo del Señor murió allí en la
tierra de Moab, conforme a la voluntad de Yahvé.
Él le enterró
en el valle, en la tierra de Moab, frente a Bet Fogor y nadie hasta hoy conoce
su sepulcro" [Deut. 34:5-6].
Ciertamente
debemos entender por "hoy" el tiempo de la composición de la
historia, ya sea que prefieras el punto de vista de que Moisés fue el autor del
Pentateuco o que Ezra lo reeditó.
En cualquier caso,
no tengo objeción.
La pregunta
ahora es si las palabras "hasta hoy" se refieren al tiempo de
publicación o escritura de los libros, y si es así que nos muestre él, ya que
tantos años han pasado desde ese día, que o los ídolos escondidos bajo la
encina han sido encontrados, o la tumba de Moisés descubierta; ya que él
obstinadamente mantiene que lo que no ocurrió hace mucho en el tiempo indicado
por "hasta" no ha sido alcanzado, empieza a ser cuando ese punto ha
sido alcanzado.
Él haría bien
en poner atención al idioma de las Sagradas Escrituras, y entender que con
nosotros (aquí es donde se atascó en el lodo) que algunas cosas que podrían
parecer ambiguas si es que, no expresadas de todo, mientras que otras se dejan
al ejercicio de nuestro intelecto.
Ya que,
mientras el evento aún estaba fresco en la memoria y vivían hombres que habían
visto a Moisés, era posible que la ubicación de su tumba fuera desconocida, más
aún puede ser esto luego del paso de tantas eras.
Y de la misma
manera debemos interpretar lo que se nos dice respecto a José.
El
Evangelista muestra una circunstancia que podría haber creado algún escándalo,
a decir, que María no era conocida por su esposo hasta que parió [a su Hijo], y
que él hizo eso para que estemos más seguros que ella, de quien José se abstuvo
mientras tuvo oportunidad de dudar la importancia de la visión, no fue conocida
después del parto.
8. En
resumen, lo que yo quiero saber es ¿por qué José se abstuvo hasta el día de su
parto?
Elvidio
responderá, por supuesto: "Porque él escuchó al ángel decir, "porque
lo que en ella es engendrado, del Espíritu Santo es" [Mateo. 1:20b]. Y a
nuestra vez responderíamos que él ciertamente había escuchado decir,
"José, hijo de David, no temas recibir a María tu esposa" [Mateo
1:20b].
La razón por
la que le estaba prohibido abandonar a su esposa era que él no pudiera pensar
que era una adúltera.
¿Es cierto
entonces, que se le ordenó no tener relaciones sexuales con su esposa?
¿No es clara
la advertencia dada a él de que él no se podía separar de ella? ¿Acaso podría
el hombre justo atreverse, dice él, a pensar en acercarse a ella, cuando
escuchó que el Hijo de Dios estaba en su vientre?
¡Excelente!
María en
todos estos eventos "conservaba todo esto en su corazón" [Lucas
2:51].
Por pura
vergüenza no puedes decir que José no sabía de esto, ya que Lucas nos dice:
"Su padre y su madre estaban maravillados de las cosas que se decían de
Él" [Lucas 2:33].
Y aun así tu
[Elvidio] con increíble descaro sostienes que la lectura de los manuscritos
Griegos es corrupta, a pesar de que casi todos los escritores griegos nos han
dejado en sus libros, y no solamente eso, pero muchos de los escritores latinos
han tomado estas palabras de la misma manera.
Tampoco
necesitamos considerar las variaciones en las copias, ya que el registro entero
de tanto el Viejo como el Nuevo Testamento han sido desde entonces traducido al
latín, y nosotros debemos creer que el agua de la fuente corre más pura que la
del manantial.
9. Elvidio
contestará, "Lo que usted dice, son, en mi opinión, puras naderías. Sus
argumentos son una gran pérdida de tiempo, y la discusión muestra más sutileza
que verdad.
¿Por qué no
puede decir la Escritura, como dijo de Tamar y Judá "Y tomó a su esposa, y
no volvió a conocerla más" [Gen. 38:26]?
¿No pudo
Mateo encontrar palabras para expresar su significado?
"No la
conoció," dice él, hasta que parió a su hijo".
Entonces él,
después del parto, la conoció, a quien se había abstenido de conocer hasta que
ella parió."
10. Si usted
es tan contencioso, sus propios pensamientos demostrarán ahora ser su amo.
Usted no debe
permitir que pase ningún tiempo entre el parto y la relación.
Usted no debe
decir, "Cuando dé a luz una mujer y tenga un hijo, será impura durante
siete días; será impura como en el tiempo de su menstruación.
El octavo día
será circuncidado el hijo, pero ella quedará todavía en casa durante treinta y
tres días en la sangre de su purificación; no tocará nada santo", [Lev.
12:2-3], y así en adelante.
En su
presentación, José debe inmediatamente acercarse a ella, y ser sujeto del
reproche de Jeremías, "Sementales bien gordos y lascivos, relinchan todos
ante la mujer de su prójimo" [Jer. 5:8].
De otra
manera, ¿cómo se pueden sostener las palabras, "no la conoció hasta que
parió a su hijo,", si él espera que expire el tiempo de otra purificación,
si su lujuria debe soportar otra larga espera de cuarenta días?
La madre debe
continuar sin purgar aún su impureza en cama, y el niño gimiente debe ser
atendido por las parteras, mientras el esposo abraza a su exhausta esposa.
Así debe
iniciar su vida matrimonial para que el Evangelista no sea culpable de
falsedad.
Pero Dios
guarde que nosotros pensemos así de la madre del Salvador y de un hombre justo.
Ninguna
partera la asistió en Su parto; no intervino ninguna mujer oficiosa.
Con sus
propias manos ella lo envolvió en sus pañales, siendo ella misma madre y partera,
"y le acostó en un pesebre, por no haber sitio para ellos en el
mesón" [Lucas 2:7]; una declaración que, por una parta, refuta los
delirios de los relatos apócrifos, ya que la misma María lo envolvió a Él en
pañales, y por otra parte hace que la voluptuosa noción de Elvidio sea
imposible, ya que no había un lugar adecuado para relaciones sexuales
matrimoniales en el mesón.
11. Una
amplia respuesta se ha dado a lo que él dice respecto a las palabras
"antes que se juntasen" y "él no la conoció hasta que ella parió
un hijo.
" Debo
ahora proceder, si mi respuesta debe seguir el orden de su argumento, al tercer
punto.
"HIJO
PRIMOGÈNITO"
Él sostiene
que María tuvo otros hijos, y cita el pasaje,
"José
subió de Galilea, de la ciudad de Nazaret, a Judea, a la ciudad de David, que
se llama Belén, por ser él de la casa y de la familia de David para
empadronarse con María, su esposa, que estaba encinta.
Estando allí
se cumplieron los días de su parto, y dio a luz a su hijo primogénito"
[Lucas 2:4-7]. De aquí él se esfuerza por mostrar que el término
"primogénito" es aplicable solo a una persona que tiene hermanos, así
como quien es el hijo único de sus padres, es llamado el "único
engendrado".
12. Nuestra
posición es esta: Todos los "únicos engendrados" son también
primogénitos, pero no todos los primogénitos son los "únicos
engendrados".
Por
primogénito entendemos no solamente a uno que viene seguido de otros, sino a
uno que no tiene predecesor.
"Todo,"
dice el Señor a Aaraón, "lo que abriere matriz en toda carne que ofrecerán
a Yahvé, así de hombres como de animales, será tuyo: más has de hacer redimir
el primogénito del hombre: también harás redimir el primogénito de animal
inmundo." [Num. 18:15].
La palabra de
Dios define al primogénito como todo lo que abriere la matriz.
De otra
manera, si el título perteneciera solo a aquellos con hermanos menores, los
sacerdotes no pueden reclamar al primero hasta que los siguientes hallan
nacido, no sea, por casualidad, en caso de que no haya más partos se probaría
ser el primogénito, no solamente el hijo único.
"Y de un
mes harás efectuar el rescate de ellos, conforme a tu estimación, por precio de
cinco ciclos, al ciclo del santuario, que es de veinte óbolos.
Mas el
primogénito de vaca, y el primogénito de oveja, y el primogénito de cabra, no
redimirás; santificados son" [Num. 18:16-17].
La palabra de
Dios me compele a dedicar a Dios todo lo que abra la matriz si es el primero de
una bestia limpia: si es de una bestia impura, debo redimirlo, y darle el
importe al sacerdote.
Yo podría
responder y decir: ¿Porque me ata al corto plazo de un mes? ¿Porque habla del
primogénito, cuando no puedo decir si le seguirán hermanos?
Espere a que
nazca el segundo.
No le debo
nada al sacerdote, a menos que el nacimiento de un segundo convierta al que
tuve previamente en primogénito.
¿Acaso no los
mismos puntos de las cartas clamarán contra mí y me condenarán por mi locura, y
declararán que el primogénito es un título de aquel que abra la matriz, y no
debe ser restringido a aquel que tiene hermanos?
Y, luego,
para tomar el caso de Juan, estamos de acuerdo de que el era el hijo único.
Quiero saber si acaso no era también el primogénito, y si acaso él no era
completamente agradable a la Ley.
No puede
haber duda en este sentido.
En todos los
eventos la Escritura habla así del Salvador,
"Y como
se cumplieron los días de la purificación de ella, conforme a la ley de Moisés,
le trajeron a Jerusalén para presentarle al Señor, (Como está escrito en la ley
del Señor: Todo varón que abriere la matriz, será llamado santo al Señor), Y
para dar la ofrenda, conforme a lo que está dicho en la ley del Señor: un par
de tórtolas, ó dos palominos.
" [Lucas
2:22ff].
Si esta ley
se relaciona solo a los primogénitos, entonces no pueden existir primogénitos a
menos que existan sucesores, nadie debería estar atado a la ley de la
primogenitura si no puede saber si tendrá sucesores.
Pero como
aquel que no tiene hermanos menores este sujeto a la ley del primogénito,
concluimos que el primogénito es aquel que abre la matriz y que no ha sido
precedido por ninguno, no por aquellos cuyo nacimiento es seguido por un
hermano menor.
Moisés
escribe en Éxodo:
"Y
aconteció que a la medianoche el Señor hirió a todo primogénito en la tierra de
Egipto, desde el primogénito de Faraón que se sentaba sobre su trono, hasta el
primogénito del cautivo que estaba en la cárcel, y todo primogénito de los
animales. (RVA) " [Ex. 12:29].
Dígame,
aquellos que perecieron por el destructor, ¿fueron solo los de su versión del
primogénito, o incluyen algo más, a los hijos únicos? Si solo aquellos que
tienen hermanos son llamados primogénitos, los hijos únicos fueron salvados de
la muerte.
Y si es un
hecho de que los hijos únicos fueron muertos, esto es contrario a la sentencia
pronunciada, que los hijos únicos mueran al igual que los primogénitos.
Usted debe ya
sea liberar al hijo único de la pena, y en ese caso se vuelve ridícula, o, si usted
admite que fueron muertos, ganamos el punto, a pesar de que no debemos
agradecerle por esto, ya que los hijos únicos también se llaman primogénitos.
"SUS
HERMANOS"
13. La última
proposición de Elvidio es esta, y es lo que nos quería mostrar cuando habló de
los primogénitos, que los hermanos del Señor son mencionados en los Evangelios.
Por ejemplo,
"Y estando él aun hablando a las gentes, he aquí su madre y sus hermanos
estaban fuera, que le querían hablar" [Mateo 12:46].
Y en otra
parte, "Después de esto descendió a Capernaun, él, y su madre, y hermanos,
y discípulos; y estuvieron allí no muchos días" [Juan 2:12].
Y otra vez,
"Y dijéronle sus hermanos: Pásate de aquí, y vete a Judea, para que
también tus discípulos vean las obras que haces.
Que ninguno
que procura ser claro, hace algo en oculto.
Si estas
cosas haces, manifiéstate al mundo" [Juan 7:3-4].
Y añade Juan,
"Porque ni aun sus hermanos creían en él" [Juan 7:5].
Marcos
también y Mateo: "Y venido a su tierra, les enseñaba en la sinagoga de
ellos, de tal manera que ellos estaban atónitos, y decían: ¿De dónde tiene éste
esta sabiduría, y estas maravillas? ¿No es éste el hijo del carpintero? ¿No se
llama su madre María, y sus hermanos Santiago y José, y Simón, y Judas? ¿Y no
están todas sus hermanas con nosotros? [Mateo 13:54-55, Marcos 6:1-3].
También Lucas
nos relata en Hechos de los Apóstoles, "Todos éstos perseveraban unánimes
en oración y ruego, con las mujeres, y con María la madre de Jesús, y con sus
hermanos" [Hechos 1:14].
Pablo el
Apóstol es uno con ellos, y es testigo de su exactitud histórica. "Empero
fui por revelación, más a ningún otro de los apóstoles vi, sino a Pedro y a
Santiago el hermano del Señor" [Gal. 2:2, 1:19].
Y nuevamente
en otro lugar, "Qué, ¿no tenemos potestad de comer y de beber? ¿No tenemos
potestad de traer con nosotros una hermana mujer también como los otros
apóstoles, y los hermanos del Señor, y Céfas? "[1 Cor. 9:4-5].
Y por miedo
cualquiera debería impedir la evidencia de los judíos, ya que es de su boca que
nosotros escuchamos el nombre de Sus hermanos, pero debemos mantener que Sus
compatriotas fueron engañados por el mismo error respecto a los hermanos en que
cayeron en su creencia acerca del padre, Elvidio emite una afilada nota de
advertencia y grita:
"Los
mismos nombres son repetidos por los Evangelistas en otro lugar, y las mismas
personas son allí hermanos del Señor e hijos de María."
Mateo dice,
"Y estaban allí (seguramente bajo la cruz del Señor) muchas mujeres
mirando de lejos, las cuales habían seguido de Galilea a Jesús, sirviéndole:
observado de lejos: Entre las cuales estaban María Magdalena, y María la madre
de Santiago y de José, y la madre de los hijos de Zebedeo. Marcos también,
"Y también estaban algunas mujeres mirando de lejos; entre las cuales
estaba María Magdalena, y María la madre de Santiago el menor y de José, y
Salomé" [Marcos 15:40]; y en el mismo lugar un poco después, "Las cuales,
estando aún él en Galilea, le habían seguido, y le servían; y otras muchas que
juntamente con él habían subido a Jerusalén." [Marcos 15:41]. Lucas
también: "Y eran María Magdalena, y Juana, y María madre de Santiago, y
las demás con ellas, las que dijeron estas cosas a los apóstoles" [Lucas
24:10].
14. Mi razón
para repetir la misma cosa una y otra vez es para evitar que él levante un
falso argumento y grite que he retenido algún pasaje que pareciera hecho para
él, y que sus puntos de vista han sido hechos pedazos no por evidencia de la
Escritura, pero por argumentos evasivos. Vean, dice, Santiago y José son hijos
de María, y son las mismas personas que fueron llamados hermanos por los
judíos.
Observe,
María es la madre de Santiago el Menor y de José. Y Santiago es llamado el
Menor para distinguirlo de Santiago el Mayor, que era el hijo de Zebedeo, como
Marcos declara en otra parte: "Y María Magdalena, y María madre de José,
miraban donde era puesto.
Y COMO pasó
el sábado, María Magdalena, y María madre de Santiago, y Salomé, compraron
drogas aromáticas, para venir a ungirle." [Marcos 15:47-16:1]. Y, como es
de esperar, él dice:
"Que
pobre e impiadosamente vemos a María, si sostenemos que cuando otras mujeres
estaban en el entierro de Jesús, que Su madre estaba ausente; o si inventamos
una especie de segunda María, sobre todo porque el Evangelio de San Juan
testifica que ella estaba allí presente, cuando el Señor sobre la cruz la
encomendó, como Su madre y ahora una viuda, al cuidado de Juan.
¿O debemos
suponer que los Evangelistas estaban tan equivocados y nos despistan al llamar
a María la madre de aquellos que eran conocidos a los judíos como hermanos de
Jesús?"
15. ¡Que
oscuridad, que violenta locura apresurándose a su propia destrucción! Usted
dice que la madre del Señor estaba presente en la cruz, usted dice que fue
confiada al discípulo Juan debido a que era viuda y estaba solitaria,
¿Como si,
bajo su propia muestra, ella tenía cuatro hijos y numerosas hijas, en cuyo seno
ella se hubiera podido consolar?
Usted también
le aplica el nombre de "viuda" que no se encuentra en la Escritura. Y
a pesar de que cita todas las ocasiones en los Evangelios, solamente las
palabras de Juan le disgustan. Usted dice al pasar que ella estaba presente en
la cruz, eso no parece haber sido omitido a propósito, y sin embargo ni una
palabra acerca de las mujeres que estaban con ella. Yo lo podría disculpar si
usted fuera ignorante, pero veo que hay una razón para su silencio.
Déjeme
mostrarle lo que Juan dice, "Y estaban junto a la cruz de Jesús su madre,
y la hermana de su madre, María mujer de Cleofás, y María Magdalena" [Juan
19:25].
Nadie duda
que había dos apóstoles de nombre Santiago, Santiago el hijo de Zebedeo, y
Santiago el hijo de Alfeo.
¿Usted
pretende que el comparativamente menos conocido Santiago el menor, quién es
llamado el hijo de María, pero no de María la madre de nuestro Señor, es un
apóstol, o no lo es?
Si él es un
apóstol, entonces debe ser el hijo de Alfeo y un creyente en Jesús,
"Porque ni aun sus hermanos creían en él.
" Si él
no es un apóstol, pero un tercer Santiago (quien puede ser él, no puedo decir),
¿Como puede ser considerado el hermano del Señor, y como, siendo un tercero,
puede ser llamado "el menor" para distinguirlo del mayor, cuando
"mayor" y "menor" son usados para denotar las relaciones
existentes, no entre tres, sino entre dos?
Observé,
además, que el hermano del Señor es un apóstol, ya que Pablo dice
"Después, pasados tres años, fui a Jerusalén a ver a Pedro, y estuve con
él quince días.
Mas a ningún
otro de los apóstoles vi, sino a Santiago, el hermano del Señor" [Gal
1:18-19].
Y en la misma
Epístola, "Y como vieron la gracia que me era dada, Santiago y Céfas y
Juan, eran considerados las columnas" [Gal. 2:9], etc.
Y para que
usted no pueda suponer que este Santiago es el hijo de Zebedeo, usted solamente
debe leer los Hechos de los Apóstoles, y encontrará que él ya había sido
asesinado por Herodes.
La única
conclusión es que la María que es descrita como la madre de Santiago el menor
era la esposa de Alfeo y la hermanad de María, la madre del Señor, aquella que
es llamada por Juan el Evangelista "María de Cleofás", ya sea por su
padre, o parientes, o por algunas otras razones. Pero si usted piensa que son
dos personas porque en otro lado leemos, "María la madre de Santiago el
menor," y aquí, "María de Cleofás" usted debe aprender aún que
es costumbre en la Escritura que un mismo individuo tenga distintos nombres.
Raquel, el
suegro de Moisés, también es llamado Jetro. Gideón, sin ninguna razón aparente
para el cambio, de pronto se convierte en Jerub-Baal.
Usías, rey de
Judea, también tiene un alternativo, Asarías. El Monte Tabor es llamado
Itabyrium.
Nuevamente
Hermón es llamado por los fenicios, Sanior y por los amoritas, Sanir.
El mismo
trecho de país es conocido con tres nombres, Negev, Teman y Darom en Ezequiel.
Pedro también
se llama Simón y Céfas. Judas el zelote es llamado en otro Evangelio Tadeo.
Y hay otros
numerosos ejemplos que el lector puede recopilar por si mismo de todas las partes
de la Escritura.
16. Ahora
aquí está la explicación de lo que estoy intentando mostrar, como es que los
hijos de María, la hermana de la madre de nuestro Señor, que, si bien antes no
eran creyentes, y después creyeron, pueden ser llamados hermanos del Señor.
Posiblemente
el caso pueda ser que uno de los hermanos creyó inmediatamente mientras los
otros no creyeron hasta mucho después, y que esa María sea la madre de Santiago
y José, es decir, "María de Cleofás," quien es la misma que la esposa
de Alfeo, el otro, la madre de Santiago el menor.
En cualquier
caso, si ella (la última) hubiera sido la madre del Señor, San Juan le hubiera
permitido el título, como todos los demás, y no la llamaría la madre de otros
que hubiera dado una impresión equivocada.
Pero a esta
altura no deseo argüir por o en contra de la suposición de que María la esposa
de Cleofás y María la madre de Santiago y José sean distintas mujeres, siempre
y cuando quede entendido que María la madre de Santiago y José no era la misma
persona que la madre del Señor.
¿Entonces cómo,
dice Elvidio, puede explicar que sean llamados los hermanos del Señor quienes
no lo eran?
Le mostraré
como es esto.
En las
Sagradas Escrituras hay cuatro tipos de hermanos – naturales, de raza, por
parentesco y por amor.
HERMANOS POR
NATURALEZA
Casos de
hermanos por naturaleza son Esaú y Jacob, los doce patriarcas, Andrés y Pedro,
Santiago y Juan.
HERMANOS POR
RAZA
Respecto a la
raza, todos los judíos son llamados hermanos de los otros, como en
Deuteronomio. "Cuando se vendiere a ti tu hermano Hebreo o Hebrea, y te
hubiere servido seis años, al séptimo año le despedirás libre de ti."
[Deut. 15:12].
Y en el mismo
libro, "Sin duda pondrás por rey sobre ti al que Yahvé tu Dios escogiere: de
entre tus hermanos pondrás rey sobre ti: no podrás poner sobre ti hombre
extranjero, que no sea tu hermano" [Deut.17:15].
Y otra vez,
"NO verás el buey de tu hermano, o su cordero, perdidos, y te retirarás de
ellos: precisamente los volverás a tu hermano" [Deut. 22:1].
Y el apóstol
Pablo dice, "Porque deseara yo mismo ser apartado de Cristo por mis
hermanos, los que son mis parientes según la carne; que son israelitas, de los
cuales es la adopción, y la gloria, y el pacto, y la data de la ley, y el culto,
y las promesas" [Rom. 9:3-4].
HERMANOS POR
PARENTESCO
Además, son
llamados hermanos por parentesco quienes son de una sola familia, es decir,
patria, que corresponde al latín paternitas, porque de una misma raíz procede
una numerosa progenie.
En Génesis
leemos, "Entonces Abram dijo a Lot: No haya ahora altercado entre mí y ti,
entre mis pastores y los tuyos, porque somos hermanos" [Gen. 13:8].
Y nuevamente,
"Entonces Lot escogió para sí toda la llanura del Jordán: y partió Lot de
Oriente, y se apartó de su hermano" [Gen. 13:11].
Ciertamente
Lot no era el hermano de Abraham, sino que el hijo de Aram, el hermano de
Abraham.
Ya que Terah
parió a Abraham y Nahor y Aram, y Aram fue el padre de Lot.
Nuevamente
leemos, "Y tomó Abram a Sarai su mujer, y a Lot hijo de su hermano"
[Gen. 12:2].
Pero si usted
aún duda si un sobrino puede ser llamado un hermano, déjeme darle un caso.
"Y oyó Abram que su hermano estaba prisionero, y armó sus criados, los
criados de su casa, trescientos dieciocho" [Gen. 14:14].
Después de
describir el ataque nocturno y la matanza, añade, "Y recobró todos los
bienes, y también a Lot su hermano." Esto es suficiente como prueba de mi
afirmación.
Por miedo a
que usted haga hacer alguna objeción con nuevos reparos, y librarse de su
dificultad como una serpiente, debo atarlo con las cuerdas de la prueba para
detener su siseo y quejas, porque sé que a usted le gustaría decir que ha sido
vencido no por la verdad de la Escritura, sino por intrincados argumentos.
Jacob, el hijo
de Isaac y Rebeca, cuando por temor a la traición de su hermano se había ido a Mesopotamia,
se acercó e hizo rodar a la piedra de la boca del pozo, y dio agua a los
rebaños de Labán, el hermano de su madre.
"Y Jacob
dijo a Raquel como él era hermano de su padre, y como era hijo de Rebeca: y
ella corrió, y dio las nuevas a su padre." [Gen. 29:11].
He aquí un
ejemplo de la regla a la que nos hemos referido, según la cual un sobrino es
llamado un hermano.
Y otra vez:
"Entonces dijo Labán a Jacob: ¿Por ser tú mi hermano, me has de servir de
balde?
Declárame qué
será tu salario." [Gen. 29:15].
Y así, cuando
al final de veinte años, sin el conocimiento de su suegro y acompañado por sus
esposas he hijos estaba retornando a su país, al alcanzarlo Labán en el monte
Gaalad y al no encontrar a los ídolos que Raquel ocultó en el equipaje, Jacob
contesta y le dice a Labán: "Entonces Jacob se enojó, y regañó con Labán;
y respondió Jacob y dijo a Labán:
¿Qué
prevaricación es la mía?
¿Cuál es mi
pecado, que con tanto ardor has venido en seguimiento mío? pues que has tentado
todos mis muebles,
¿qué has
hallado de todas las alhajas de tu casa?
Ponlo aquí
delante de mis hermanos y tuyos, y juzguen entre nosotros ambos" [Gen.
31:36-37].
Dígame ¿quiénes
son esos hermanos de Jacob y Labán que estaban presentes?
Esaú, el
hermano de Jacob, ciertamente no estaba allí, y Labán, el hijo de Betuel, no
tenía hermanos, aunque si tenía una hermana llamada Rebeca.
HERMANOS POR
AFECTO
17. Se pueden
encontrar innumerables casos del mismo tipo en los libros sagrados.
Pero, para
ser breve, retornaré a la última de las cuatro clases de hermanos, es decir
aquellos que son hermanos por afecto, y nuevamente estos caen una de dos
divisiones, aquellos de lo espiritual y aquellos de la relación general.
Digo
espiritual porque todos nosotros los cristianos nos llamamos hermanos, como en
el verso "¡MIRAD cuán bueno y cuán delicioso es Habitar los hermanos
igualmente en uno! " [Salmo. 133:1].
Y en otro lugar:
"ve a mis hermanos, y diles " [Juan 20:17].
También he
dicho de relación general, ya que todos somos hijos de un Padre, existe una
obligación de hermandad entre todos nosotros.
"Diles a
aquellos que te odian," dice el profeta, "que eres nuestro hermano"
[Is. 66:5].
Y el apóstol
escribiendo a los Corintios: "Mas ahora os he escrito, que no os
envolváis, es a saber, que, si alguno llamándose hermano fuere fornicario, o
avaro, o idólatra, o maldiciente, o borracho, o ladrón, con el tal ni aun
comáis " [1 Cor. 5:11].
"LOS
HERMANOS DEL SEÑOR"
Ahora yo
pregunto, a que clase considera que los hermanos del Señor deben ser asignados.
Estos son hermanos por naturaleza, dice usted.
Pero la
Escritura no dice esto; no los llama ni hijos de María, ni de José.
¿Deberíamos
decir que son hermanos por raza?
Pero es
absurdo suponer que unos pocos judíos eran llamados Sus hermanos cuando todos
los judíos de la época podrían haber llevado este título.
¿Eran
hermanos por virtud de una intimidad muy cercana y la unión de corazón y mente?
Si así fuera,
¿quiénes eran verdaderamente más hermanos que los apóstoles que recibieron Su
instrucción privada y fueron llamados por Él "mi madre y hermanos"?
Nuevamente,
si todos los hombres, como tales, son Sus hermanos, sería tonto entregar un
mensaje especial "Te buscan tus hermanos," ya que todos los hombres
por igual merecen ese título.
La única
alternativa es adoptar la explicación previa y entender que eran llamados
hermanos por virtud del lazo de parentesco, no de amor y simpatía, no por
prerrogativa de raza, menos aún por naturaleza.
Justo como
Lot fue llamado hermano de Abraham, y Jacob de Labán, justo como las hijas de
Zelofead recibieron mucho de entre sus hermanos, justo como el mismo Abraham
tuvo que casarse con Sarah su esposa, ya que él dice, "Y a la verdad
también es mi hermana, hija de mi padre, mas no hija de mi madre, y tómela por
mujer. " [Gen. 20:11].
De otra
manera ¿que hemos de decir de Abraham, un hombre justo, tomando como esposa a
la hija de su propio padre?
La Escritura,
al relatar la historia de los hombres de los primeros tiempos, no nos
escandaliza al hablar de la enormidad en términos expresos, pero prefiere que
sea inferido por el lector, y Dios después da a la prohibición la sanción de la
ley, y amenaza: "No tendrás relaciones con tu hermana, hija de tu padre o
de tu madre, nacida en casa o fuera de ella" [Levítico 18:9].
18. Hay
ciertas cosas que usted, en su extrema ignorancia, jamás ha leído, y por lo
tanto descuida el completo alcance de la Escritura y emplea su locura en
ultrajar a la Virgen, como el hombre de la historia que, siendo desconocido
para todos y percatándose de que no podía inventar alguna buena obra para ganar
renombre, quemó el templo de Diana, y cuando nadie descubrió el acto sacrílego,
se dice que él mismo fue de arriba a abajo proclamando que él había sido quien
inició el fuego.
Los
gobernantes de Éfeso tuvieron curiosidad de su motivo para hacer esta cosa, a
lo que respondió que, si no podía tener fama por sus buenas obras, todos los
hombres deberían darle crédito por las malas.
La historia
griega relata el incidente.
Pero usted lo
hace peor.
¡Usted ha
prendido fuego al Templo de cuerpo del Señor! ¡Usted ha deshonrado al santuario
de Espíritu Santo del cuál usted está determinado a hacer venir a un equipo de
cuatro hermanos y un montón de hermanas!
En una
palabra, uniéndose al coro de los judíos, usted dice, "¿Acaso no es el
hijo del carpintero?
¿No se llama
su madre María, y sus hermanos Santiago, José, Simón y Judas?
¿Y sus
hermanas, no están todas con nosotros? "[Mateo 13:55, Marcos 6:3].
La palabra
todas no se utilizaría si no fueran muchas de ellas.
Por favor
dígame, ¿quién, antes de que usted apareciera, conocía esta blasfemia?
¿Quién daría
el valor de un centavo a la teoría?
Usted ha
logrado su deseo, y se ha vuelto notorio por el crimen.
En cuanto a mí,
que soy su oponente, a pesar de que vivimos en la misma ciudad [Roma], no sé,
como dice el refrán, si usted es blanco o negro. Ignoro las faltas de dicción
que abundan en cada libro que usted escribe.
No diré ni
una sola palabra acerca de su absurda introducción.
¡Dios del
cielo!
Yo no pido
elocuencia, ya que, sin usted tenerla, a pedido a su hermano Caterio que se la
suministre.
Yo no pido
gracia o estilo; yo busco la pureza de alma: porque con los cristianos es el
mayor de los solecismos y de vicios de estilo el introducir lo que sea basado
ya sea en palabra o acción.
He llegado a
la conclusión de mi argumento.
Trataré con
usted como si aún no hubiera vencido en nada, y se encontrará en los cuernos de
un dilema.
Es claro que
los hermanos de nuestro Señor llevaban el nombre en la misma manera de que José
era llamado su padre: "He aquí, tu padre y yo te hemos buscado con
dolor." [Lucas 2:48].
Era Su madre
quien decía esto, no los Judíos.
El mismo
Evangelista relata que Su padre y Su madre se maravillaban de las cosas que se
decían respecto a Él, y hay pasajes similares que ya han sido citados en los
cuales José y María son llamados sus padres.
Viendo que a
sido lo suficientemente tonto para persuadirse a sí mismo de que los
manuscritos griegos están corruptos, quizás usted se defenderá con la
diversidad de versiones.
Yo por lo
tanto voy al Evangelio de San Juan, y allí está escrito claramente:
"Felipe halló a Natanael, y dísele: Hemos hallado a aquel de quien escribió
Moisés en la ley, y los profetas: a Jesús, el hijo de José, de Nazaret "
[Juan 1:45].
Usted
ciertamente encontrará esto en su manuscrito.
Ahora dígame,
¿Cómo puede ser Jesús hijo de José cuando es claro que fue engendrado por el
Espíritu Santo?
¿Es José Su
verdadero padre?
Aburrido como
usted es, no se atreverá a decir eso.
¿Era su padre
por atribución?
Si era así,
deje que la misma regla se aplique a los que son llamados sus hermanos, la que
usted aplica a José cuando él es llamado padre.
LOS
"ALIADOS" DE ELVIDIO
19. Ahora que
he salido de las rocas y arrecifes, debo soltar la vela e ir a toda velocidad a
alcanzar a su epílogo. Sintiendo que él mismo es alguien muy superficial, aquí
saca a relucir a Tertuliano como testigo y cita las palabras de Victorio,
obispo de Petavium. De Tertuliano solo digo que él no pertenecía a la Iglesia.
Pero acerca de Victorino, yo aseguro lo que ya ha sido probado desde el
Evangelio – que él hablaba de los hermanos del Señor no como hijos de María,
sino como hermanos en el sentido que he explicado, es decir, hermanos por
parentesco y no por naturaleza. Estamos, sin embargo, gastando nuestras fuerzas
en naderías, y, dejando a la fuente de la verdad, estamos siguiendo a los
pequeños riachuelos de la opinión.
LOS OPONENTES
DE ELVIDIO
¿Acaso no
puedo formar en su contra toda la serie de antiguos escritores?
Ignacio,
Policarpo, Ireneo, Justino Mártir, y muchos otros hombres apostólicos y
elocuentes, quienes en contra de Ebio, Teodoto de Bizancio, y Valentino,
mantenían estos mismos puntos de vista, y escribieron volúmenes repletos de
sabiduría.
Si acaso
alguna vez ha leído lo que ellos escribieron, usted sería un hombre más sabio.
Pero pienso
que es mejor contestar brevemente a cada punto que entretenerse más y extender
mi libro demasiado.
20. Ahora
dirijo el ataque contra el pasaje en el cual, deseando mostrar su astucia,
usted instituye una comparación entre virginidad y matrimonio. No pude contener
una sonrisa, y pensar en el dicho,
"¿Han visto a un camello bailar?"
Paz
y Bien
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