LA SANTISIMA
TRINIDAD
¿Qué pasajes del Evangelio según San Juan nos
presentan a la Santísima trinidad?
En los capítulos 14 y 15 de juan existen numerosas
referencias a la Trinidad.
Por ejemplo, cuando Jesús habla del Espíritu Santo
dice que será enviado por el padre.
“El Paráclito, El Espíritu Santo, que el Padre enviara
en mi nombre, os lo enseñara todo y os recordará todo lo que Yo os he dicho” (Juan 14,26).
También Jesús enseña que ÉL enviará al Espíritu Santo
que está junto al Padre.
“Cuando venga el paráclito, que Yo les enviaré de
junto al Padre, el espíritu de la verdad, que procede del Padre, Él dará testimonio de mi” (juan 15,26)
¿En qué pasajes del cuerpo paulino se habla de la
Trinidad?
Tanto en la carta a los Romanos como en la carta a los
Gálatas, San Pablo nos presenta a las tres personas divinas al explicarnos
nuestra condición de hijos de Dios.
Somos hijos de Dios Padre en su Hijo, Jesucristo,
gracias a la acción del Espíritu Santo.
“Pues no recibieron un espíritu de esclavos para
recaer en el temor; antes bien, recibieron un espíritu de hijos adoptivos que
nos hace exclamar: ¡Abbá, Padre! El Espíritu mismo se une a nuestro espíritu
para dar testimonio de que somos hijos de Dios.
Y, si hijos, también herederos: herederos de Dios y
coherederos de Cristo, ya que sufrimos con Él, para ser también con Él
glorificados “ (Romanos 8,15-17).
“La prueba de que son hijos es que Dios ha enviado a
nuestros corazones el espíritu de su hijo que clama ¡Abbá, Padre!” (Gálatas4,
6).
La primera carta a los Corintios nos enseña que hay un
solo Espíritu Santo, un solo Señor, y un solo Dios Padre.
“Hay diversidad de carismas, pero el Espíritu es el
mismo; diversidad de ministerios, pero el señor es el mismo; diversidad de
operaciones, pero es el mismo Dios que obra en todos (1Corintios 12, 4-6).
En la segunda carta a los Corintios, Pablo presenta la
gracia de Jesús, el amor de Dios Padre y la comunión que obra el Espíritu
Santo.
“La gracia del Señor Jesucristo, el amor de Dios y la
comunión del Espíritu Santo sea con todos vosotros” (2Corintios 13,13)
San Pablo en la segunda carta a los Tesalonicenses
indica que debemos dar gracias a Dios Padre, señala la acción santificadora del
Espíritu Santo, y nos habla de participar de la gloria de Jesús.
“Nosotros, en cambio, debemos dar gracias en todo
tiempo a Dios por vosotros, hermanos, amados del Señor, porque Dios os ha
escogido desde el principio para la salvación mediante la acción santificadora
del Espíritu y la fe en la verdad.
Para esto os ha llamado por medio de nuestro Evangelio, para que
consigáis la gloria de nuestro Señor Jesucristo“ (2Tesalonicenses 2,13-14).
¿Existe algún pasaje de las cartas Católicas en que
aparezcan las tres personas divinas?
Destaca el inicio del primer capítulo de la primera
carta de Pedro.
El apóstol se refiere al conocimiento de Dios Padre, a
la acción Santificadora del Espíritu Santo, y la sangre del Hijo.
“Pedro, apóstol de Jesucristo, a los que viven como
extranjeros en la dispersión: en el ponto Galicia, Capadocia, Asia y Bitinia,
elegidos según el previo conocimiento de Dios Padre, con la acción
santificadora del Espíritu, para obedecer a Jesucristo y ser rociados con su
sangre.
A vosotros gracia y paz abundantes” (1Pedro 1, 1-2).